LA ESPERANZA EN COPENHAGUE
Publicado por LalaEnLaRevolucion en viernes, noviembre 27, 2009 Etiquetas: climaMUJERES Y MEDIO AMBIENTE
Publicado por LalaEnLaRevolucion en viernes, noviembre 27, 2009 Etiquetas: clima, derechos humanos, medio ambienteAl hilo de la lucha por los Derechos Humanos que acontece esta semana, me preguntaba que entendía la comunidad internacional por “violencia” contra la mujer, porque a tod@s nos viene a la cabeza los cientos de mujeres maltratadas e incluso muertas a manos de los que se supone las querían, pero yo siento que va más allá, violencia también comprende la presión social negativa que pone a la mujer en desigualdad de condiciones frente al hombre. Es la violencia social.
En la protección del medio ambiente el papel que juega la mujer es importante, porque me atrevería a decir que la mujer potencialmente se involucra más en los problemas, en los conflictos del día a día, se conciencia con más facilidad, y en ese sentido tiene algo que enseñar a los hombres.
Desde la educación ambiental se está trabajando sobre este tema para poner en valor la participación de la mujer en la mejora del medio ambiente a la par que se promueve la sensibilización en género y medioambiente en los centros educativos.
El Programa Geoda: “Mujeres y Medioambiente” de la Junta de Andalucía es un ejemplo fabuloso de política ambiental con enfoque de género, un programa integrador que pretende educar en igualdad de oportunidades para la participación equitativa en las políticas medioambientales, fusionando Igualdad de Género, Educación Ambiental y Desarrollo Sostenible.
Desde este programa lanzan una propuesta interesantísima que llaman "Talleres participativos sobre medidas ante el Cambio Climático desde la Igualdad de Género". Si estuviera por Andalucía sin duda me inscribiría.
EL NIÑO, CIUDADANO CON DERECHOS
Publicado por LalaEnLaRevolucion en jueves, noviembre 26, 2009 Etiquetas: derechos humanosNo hay que olvidar que el derecho implica responsabilidad y la participación significa elegir para lo cual deben estar informados, formados y concienciados, no sólo los niños y los jóvenes, también los adultos.
Pasó la semana dedicada a los derechos de la infancia, justicia de mínimos vulnerados en todo el mundo relacionados intimamente con los Objetivos del Milenio. Historias que nos encogen el corazón hay millones, algunas de ellas las hemos podido hasta visionar. Esperaremos a ver si el próximo 20 de noviembre tve nos tiene que concienciar un poquito menos.
EMPLEO VERDE QUE TE QUIERO VERDE
Publicado por LalaEnLaRevolucion en miércoles, noviembre 18, 2009 Etiquetas: cambio estilo vida, sostenibilidadEmpleos verdes son los que reducen el impacto ambiental de las empresas y los sectores económicos, hasta alcanzar en definitiva niveles sostenibles. En el informe se entiende por empleos verdes el trabajo en la agricultura, la industria, los servicios y la administración que contribuye a conservar o restablecer la calidad ambiental. Los empleos verdes se encuentran en muchos sectores de la economía, desde el suministro de energía hasta el reciclado y desde la agricultura hasta la construcción y el transporte. Esos empleos ayudan a reducir el consumo de energía, materias primas y agua mediante estrategias de gran eficiencia, a descarbonizar la economía y a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, a disminuir o evitar por completo todas las formas de desechos y de contaminación, y a proteger y restablecer los ecosistemas y la biodiversidad.
PERO HAY DISTINTAS TONALIDADES DE VERDE.
SEGURIDAD ALIMENTARIA ANTE MIL MILLONES DE HAMBRIENTOS.
Publicado por LalaEnLaRevolucion en jueves, noviembre 12, 2009 Etiquetas: derechos humanosCORTO Y CAMBIO. VOY A HACER LA COLADA
Publicado por LalaEnLaRevolucion en jueves, noviembre 12, 2009 Etiquetas: clima¿PODEMOS ESPERAR ALGÚN ACUERDO EN COPENHAGUE?
Publicado por LalaEnLaRevolucion en miércoles, noviembre 04, 2009 Etiquetas: climaBarcelona acoge esta semana la reunión sobre cambio climático que ha de fijar el texto a negociar el próximo mes de diciembre.
Jordi Flamarich
Sostenible.cat
02-11-2009
Este lunes empieza en Barcelona la reunión que ha de fijar el texto a negociar el próximo mes de diciembre en Copenhague, y que debe suponer el relevo al Protocolo de Kioto. Se darán cita más de 4.000 expertos y representantes venidos de casi 200 países. La capital catalana se convierte así en la última estación de un camino que comenzó en Bali y que últimamente ha pasado por Bonn y Bangkok. Un camino, sin embargo, de final aún incierto.
Copenhague parece para todo el mundo la última parada, el lugar de donde saldrá el gran acuerdo global que nos ayudará a hacer frente al calentamiento global. De hecho, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, lleva años reclamando a los líderes políticos un nuevo marco político internacional contra el cambio climático, pero a medida que nos acercamos a la gran fecha se impone la cautela.
Ni siquiera desde Naciones Unidas se ven claras las cosas: la semana pasada, Janos Pasztor, asesor de Ban, reconoció que es "poco probable" que se llegue a ningún acuerdo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en la cumbre de diciembre. Hay muchos números para que las reuniones terminen con una declaración política no vinculante, por lo que desde la secretaría general de la ONU ya se estaría planificando una agenda de conversaciones y reuniones "post-Copenhague".
En la misma línea, Yvo de Boer, secretario de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, ha admitido que será "físicamente imposible cerrar todos los detalles del acuerdo en Copenhague", por lo que el encuentro en diciembre debe servir para establecer un marco político que dé respuesta al reto del cambio climático de forma "clara, realista y bien definida". Los detalles se deberán pulir, pero, durante 2010, para que el ansiado acuerdo pueda entrar en vigor en 2012, cuando finaliza el protocolo de Kyoto, asegura De Boer.
¿Llegarán los Estados Unidos a tiempo? Nadie duda que la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca ha marcado un giro de 180 grados en la política ambiental estadounidense. El pasado mes de junio, la Cámara de Representantes aprobó un proyecto de ley que, por primera vez, imponía límites a las emisiones de gases de efecto invernadero y promueve la transición hacia fuentes de energía menos contaminantes. Lo que ya no está tan claro es que este proyecto se termine concretando antes de la cita en Copenhague, sobre todo por la resistencia que encontrará en el Senado de la mano de los representantes republicanos.
Sin unos números claros sobre objetivos de reducción de emisiones sobre la mesa, la indefinición norteamericana puede ser, una vez más, fatal. "Necesitaremos que los Estados Unidos den una cifra durante la negociación", aseguraba hace unos días Ed Miliband, secretario de Energía y Clima británico, "sin los números será imposible que tengamos éxito en Copenhague".
Los cuatro puntos críticos El caso de los Estados Unidos es justamente el paradigma del primero de los cuatro puntos críticos que, según De Boer, deberán superarse en Copenhague: establecer unos nuevos objetivos -y más ambiciosos- de reducción de las emisiones para los países industrializados. El segundo punto crítico será conseguir un compromiso por parte de los países en desarrollo para frenar el crecimiento de sus emisiones. En tercer lugar, habrá que llegar a un acuerdo sobre la financiación necesaria para ayudar a los países más pobres a adaptarse al cambio climático y fomentar su desarrollo 'limpio'. Finalmente, el cuarto punto crítico será la creación de una institución internacional para administrar estas ayudas.
Precisamente, el tema de las ayudas a los países emergentes fue tratado el pasado viernes por los líderes de la Unión Europea. Tras duras discusiones, los Veintisiete sólo fueron capaces de cuantificar el volumen de las compensaciones para el año 2020, unos 100.000 millones de euros anuales. Pero ni una palabra acerca de cómo se repartirá finalmente esta cantidad entre los países industrializados, cuestión que queda aparcada hasta la cumbre de Copenhague.
Hace unas semanas, la Comisión Europea calculó que entre 22.000 y 50.000 de estos millones deberían ser asumidos por los erarios públicos de los países ricos, y el resto por la industria (a través de los ingresos del mercado de carbono). Al mismo tiempo, la Comisión fijó la cantidad correspondiente a los países de la Unión Europea entre los 2.000 y 15.000 euros anuales. Lo amplio de estas horquillas a la hora de fijar las compensaciones ya es un mal indicador, pero aún lo es más que esta propuesta puede quedar en papel mojado si la UE es incapaz de convencer a los Estados Unidos y Japón para que se sumen al acuerdo.
ARTÍCULO DE JORDI FLAMARICH PUBLICADO EN WWW.SOSTENIBLE.CAT CON FECHA DE 2 DEL 11 DE 2009.